Yahweh Dios Hijo y el Espíritu Santo del Padre, formaban los Elohim. Ellos habían creado el universo y todo lo que existe, El Padre esta esencialmente más allá del principio y del final de todo lo quisiéramos o pudiésemos imaginar o conocer.
Cuando ellos sacaron al hombre del paraíso y le llevaron a la tierra, Dios hijo estaba presente a cada momento, nuevamente el hombre cometió un pequeño desliz: Caín mato a Abel. Nuevamente el castigo, y fue expulsado de “la tierra” y allí tomo una esposa descendiente de las razas creadas fuera de Edén que no tenían neshamá y con ella tuvo un primer hijo. Los primeros hombres: Adán, Caín y luego Set tuvieron numerosos hijos provenientes de estas razas, pero sucedió algo increíble los descendientes no tenían un particular parecido con los naturales de la tierra, eran iguales a sus padres, se podía conocer que eran hijos de hombre. poco tiempo después dejaron de cruzarse con mujeres de las tribus nativas y forjaron una nación familiar, no existía la posibilidad de un cruce sanguíneo por vía paterna. Enoch fue el primer hombre nacido de un hijo de Dios y un hijo de la tierra, e increíblemente poseía la neshamá, el creador estaba permanentemente siguiendo la vida en la tierra. Y el neshamá no desaparecía…
y tampoco el conocimiento adquirido con el árbol del bien y del mal.
La historia bíblica nos cuenta como el hombre cayo una y otra vez, hasta los mismos hijos de Dios tomaron las hijas de los hombres porque eran hermosas, y engendraron hijos, y estos hijos fueron fenómenos no humanos. Hasta los hijos de Dios cambiaron de plano, la lujuria en los hijos e hijas del hombre, todo se había rebelado la creación estaba en cáos.
Génesis 6
La historia bíblica nos cuenta como el hombre cayo una y otra vez, hasta los mismos hijos de Dios tomaron las hijas de los hombres porque eran hermosas, y engendraron hijos, y estos hijos fueron fenómenos no humanos. Hasta los hijos de Dios cambiaron de plano, la lujuria en los hijos e hijas del hombre, todo se había rebelado la creación estaba en cáos.
Génesis 6
1 Y ACAECIO que, cuando comenzaron los hombres á multiplicarse sobre la faz de la tierra, y les nacieron hijas,
2 Viendo los hijos de Dios que las hijas de los hombres eran hermosas, tomáronse mujeres, escogiendo entre todas.
3 Y dijo Jehová: No contenderá mi espíritu con el hombre para siempre, porque ciertamente él es carne: mas serán sus días ciento y veinte años.
4 Había gigantes en la tierra en aquellos días, y también después que entraron los hijos de Dios á las hijas de los hombres, y les engendraron hijos: éstos fueron los valientes que desde la antigüedad fueron varones de nombre.
5 Y vió Jehová que la malicia de los hombres era mucha en la tierra, y que todo designio de los pensamientos del corazón de ellos era de continuo solamente el mal.
6 Y arrepintióse Jehová de haber hecho hombre en la tierra, y pesóle en su corazón.
7 Y dijo Jehová: Raeré los hombres que he criado de sobre la faz de la tierra, desde el hombre hasta la bestia, y hasta el reptil y las aves del cielo: porque me arrepiento de haberlos hecho.
8 Empero Noé halló gracia en los ojos de Jehová.
9 Estas son las generaciones de Noé: Noé, varón justo, perfecto fué en sus generaciones; con Dios caminó Noé.
10 Y engendró Noé tres hijos: á Sem, á Châm, y á Japhet.
11 Y corrompióse la tierra delante de Dios, y estaba la tierra llena de violencia.
12 Y miró Dios la tierra, y he aquí que estaba corrompida; porque toda carne había corrompido su camino sobre la tierra.
13 Y dijo Dios á Noé: El fin de toda carne ha venido delante de mí; porque la tierra está llena de violencia á causa de ellos; y he aquí que yo los destruiré con la tierra.
14 Hazte un arca de madera de Gopher: harás aposentos en el arca y la embetunarás con brea por dentro y por fuera.
15 Y de esta manera la harás: de trescientos codos la longitud del arca, de cincuenta codos su anchura, y de treinta codos su altura.
16 Una ventana harás al arca, y la acabarás á un codo de elevación por la parte de arriba: y pondrás la puerta del arca á su lado; y le harás piso bajo, segundo y tercero.
17 Y yo, he aquí que yo traigo un diluvio de aguas sobre la tierra, para destruir toda carne en que haya espíritu de vida debajo del cielo; todo lo que hay en la tierra morirá.
18 Mas estableceré mi pacto contigo, y entrarás en el arca tú, y tus hijos y tu mujer, y las mujeres de tus hijos contigo.
19 Y de todo lo que vive, de toda carne, dos de cada especie meterás en el arca, para que tengan vida contigo; macho y hembra serán.
20 De las aves según su especie, y de las bestias según su especie, de todo reptil de la tierra según su especie, dos de cada especie entrarán contigo para que hayan vida.
21 Y toma contigo de toda vianda que se come, y allégala á ti; servirá de alimento para ti y para ellos.
22 E hízolo así Noé; hizo conforme á todo lo que Dios le mandó